En Terapia Esencial nos planteamos un duro dilema. Si los pacientes y personas necesitadas de las flores de bach debido a las grandes corrientes comerciales del sector cada vez se convertían más y más en personas pasivas, ya no son personas activas que se buscan a si mismas sino enfermos en el sentido médico de
Considero que todos los días son buenos para permitirse un tiempo y un espacio para dedicarse a si mismo con una finalidad curativa. Cuantos más pacientes trates más enfermo puedes estar. Y si no tratas apenas ninguno tampoco es síntoma de que seas un terapeuta inadecuado o estás muy enfermo. O de que no sepas
Lo cierto es que la experiencia de vivir día tras día, a lo largo de muchos años, elaborando las flores, sintiendolas, reconociendolas como algo cotidiano, resolviendo conflictos en sus códigos y en consonancia con una filosofía, un esquema y una forma de hacer las cosas ( siempre basada en la sensibilidad de las flores )
Se podría resumir en una frase: nosotros formamos la sensibilidad de los terapeutas. Nuestros cursos no son un entrenamiento ( eso queda para los atletas: alterofilia, esgrima…), tampoco aspiramos a educarte ( ya somos mayorcitos todos ) ni encuadramos las flores dentro de la naturopatía ( esto implica que te enseñarán kinesiología y a Edward
